Te recuerdo en aquella terraza frente a la mía fumando un cigarrillo mientras me mirabas en aquellas calurosas noches de verano.
Las cosas materiales duran más que las personas, y en esa calle sigue el mismo buzón de correos y el mismo supermercado. En aquellas casas, la tuya y la mía, vive otra gente que no sabe de nosotros, ni de aquél deseo que nos envolvió un tiempo, ni de tus ojos verdes taladrándome la vida, los esquemas, la compostura, hasta que nos perdimos, porque la vida a veces es tan injusta... y porque no supimos dar el siguiente paso.
No sé si tu aroma es algo material o no, pero sigue prendido en cada pliegue de mi ropa y de mi piel.
Siempre en mi recuerdo y en mi corazón, AMOR.
Tú también, Ana, deberías escribir más, aunque estoy seguro de que lo haces, ya que con pocas palabras llegas al corazón que lee tus escritos.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz fin de semana.
Muchas gracias Rafael. Un abrazo.
EliminarMe alegra cada vez que veo que has escrito, porque sé que voy a encontrar una perla.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ya quisiera yo escribir perlas, lo que escribo es sólo el sentimiento que me sale desde el corazón hasta la mano con toda la torpeza del mundo y este desentreno. Tengo que engrasar un poco las neuronas. BESICOS DESDE JAÉN.
EliminarQué alegría volver a leerte. No sabía que habías vuelto. Y me alegra mucho.
ResponderEliminarSiempre me gustó como escribes y los sentimientos que vuelan entre tus letras.
Un beso grande.
Muchas gracias, Carmela, hacía mucho que no escribía, y estoy un poco desentrenada, no tengo mucho tiempo pero siempre tengo el gusanillo de escribir por dentro. Me alegra saber de ti. Un beso.
EliminarTodo se va y todo vuelve o, al menos, eso quiero pensar yo. Que todo vuelve aunque sea con otra cara, otro cuerpo y otro aire
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